viernes, 25 de enero de 2013

Bindôlin para El Anillo único

Como bien sabéis, estoy trabajando en una aventura para El Anillo único: Aventuras al borde de El Yermo. El caso es que ya tengo el cuerpo de la aventura listo, y estoy en plena revisión. Mi idea es publicarla a principio del mes de febrero. 

Dejando de lado la aventura, puedo decir que al haber estado leyendo en profundidad el juego de Francesco Nepittello, dos pensamientos han venido fuertemente a mi cabeza. El primero de ellos es que estamos ante un enorme juego. He de decir que la primera lectura rápida que le dí en su momento no me convenció en absoluto. Sin embargo, creo que estamos ante un juego sensacional, mucho más completo que mi amado MERP y con una mecánica no tan compleja como uno podría suponer en un principio.

martes, 22 de enero de 2013

La muerte de los PJs

En los grupos de juego que he dirigido o jugado, en rara ocasión los PJs llegaron a morir. Existía una especie de código no escrito en el que el Director de Juego (normalmente yo) no iba a poner en peligro real de muerte a los PJs. Por supuesto, es un tema del que nunca se llegó a hablar en voz alta en la mesa de juego, pero era algo que se sabía, que se respiraba (aparte del olor a pizza, coca cola o cerveza). Hoy, rompiendo esa regla autoimpuesta, me gustaría arrojar unas ideas sobre la muerte de los PJs. 


En primer lugar cabe plantearse en qué situación se va a producir la muerte de los PJs (este se supone un paso previo a ella, porque si no es así, vamos listos). Los PJs se suponen héroes, en mayor o menor medida, pero héroes al fin y al cabo. De alguna u otra forma deben superar las dificultades que se plantean, pues se trata de personajes que de uno u otro modo son capaces de hacer frente a las adversidades. Creo que convendremos que carece de lógica matar a las primeras de cambio a los PJs, entre otras cosas porque puede cundir el desánimo de los jugadores y quedarte sin grupo de juego en menos que canta un gallo. A todos nos gusta jugar, y a nadie le gusta perder.

viernes, 18 de enero de 2013

Recurriendo a la tablet por primera vez

Como bien sabéis, soy un gran defensor del lápiz y el papel. Por mucho que las nuevas tecnologías estén cada vez más presentes en nuestras vidas, termino decantándome por esta arcaica forma de dirigir partidas de rol. Puede ser el encanto de esas partidas de cuando empecé con esto, los recuerdos de los buenos momentos que pasé jugando a MERP, o simplemente que en mi casa jugamos así. Sin embargo, hoy os cuento mi primera experiencia con tablet. 

Por supuesto, para poder llegar a este momento el primer paso es haber adquirido una tablet. Esto tuvo una grata solución en Navidades, ya que mi chica me regaló una Samsung Galaxy Tab 2. Sí, no merezco tal regalo, pero es lo que hay. La sesión que hoy os relato se daba en un contexto navideño, reunido con la familia, y con mis primos como jugadores. Efectivamente, es una de esas sesiones de la campaña que os llevo contando desde hace tanto tiempo. 


El caso es que acudí a casa de mis tíos con lo que llamo "survival kit", que no deja de ser una mochila con el manual de Star Wars d6, lápices de IKEA, dados, fichas de personajes y la aventura que esté jugando con mis primos en ese momento. Fue en este último elemento en el que erré. Tras varias partidas sin aventura escrita, decidí que tocaba sacar partido a las aventuras de la caverna, así que comenzamos unos días antes la campaña formada por Asalto en el espacio y Anoat. Mi fallo vino cuando, sin haber terminado la primera de las aventuras, descubrí que lo que tenía en la mochila era la segunda...

lunes, 14 de enero de 2013

Rumbo a Coruscant

Entrar en Coruscant siempre ha sido difícil, pero todavía lo es más si acabas de escapar de un control imperial y tienes como rehén a un oficial del Imperio. El viaje que os cuento hoy no supondría ni mucho menos una excepción a esta regla de oro. 


Acudí una vez más a la zona de carga de la nave. Allí, en esa habitación vacía, algo extraño considerando que solía estar cargada con todo tipo de material que necesitaba "una importación/exportación rápida", estaba Kate. Necesitaba un momento a solas con ella, para aclarar aquello de una vez. 

- Explícame todo, Kate- le dije con desdén.
- Rick, espera a llegar a Coruscant. Todo encajará ahí.

martes, 8 de enero de 2013

Sangre de orco

Corrí hacia los orcos. El éxito de mis plegarias a los valar para que mi caballo no huyese fruto del miedo se vería más tarde. Sin embargo, lo que más me importaba ahora era tratar de salvar la vida a los lugareños asediados por las inmundas bestias de Mordor. 

- ¡Socorro!- escuché gritar a un hombre que estaba tendido en el suelo. Las carcajadas del orco que lo acechaba murieron ahogadas en una flecha que le atravesó la garganta. Sin embargo, yo no había armado mi arco todavía. Desconcertado, miré a un lado y a otro. 

Fue un momento después cuando me percaté de quién había atacado. Se trataba de elfos. No eran elfos de mi pueblo, sino gentes de Elrond, sin duda alguna. Allí, lejos de Rivendel, en la oscuridad de aquel día, su presencia fue como un rayo de luz que traía esperanza a aquellas gentes.


- ¡Ayuda!- gritó una mujer que trataba huir de unos orcos con su hijo en brazos. Aquella no era una buena idea, pues los orcos corren llevados por el frenesí de la batalla hasta el confín del mundo. Por fortuna para aquella mujer mi espada fue más rápida y certera que las cimitarras de los orcos que estaban más cerca de ella. 

viernes, 4 de enero de 2013

Diario de campaña: Star Wars d6 (V)

Prosigo el relato de la campaña de Star Wars d6 con mis primos. Seguro que recordaréis que estábamos en el laboratorio tras haber provocado la muerte de los científicos que íbamos a rescatar. Pues bien, el grupo siguió investigando las instalaciones, sin encontrar nada más de provecho ni de peligro en ellas. Subieron a la nave, haciendo un balance nada bueno de lo hecho allí. Si bien el grupo había sido aumentado con un nuevo miembro, la misión principal había fracasado, ya que ningún científico fue rescatado. Al menos, los restos de Dianoga serían un buen elemento para que el rapapolvo fuese menor. 

La nave despegó sin mayores inconvenientes y, tras realizar los cálculos de astrogación, inició el viaje a Mon Calamari. No os aburriré con el detalle del viaje, pues poco en verdad hay que contar de él. Una vez en destino y a bordo del Home One, que orbitaba el planeta, el grupo entregó la muestra de Dianoga y recibió su premio, bastante mermado por el pobre resultado de la misión. 


Minutos después estaban preparados una vez más para la acción. Así, el grupo recibió un nuevo encargo. Su misión: viajar a Anoat para estudiar la viabilidad de una base rebelde en ese planeta. Tras unos rápidos preparativos, el grupo declinó una nave que les ofrecía la Alianza, optando así por la nave de Jaden. El viaje estelar a Anoat no se hizo esperar, aunque el resultado no fue el mejor, pues la nave salió al hiperespacio en mitad de un campo de asteroides. Kyle tomó los mandos y, tras varias acciones arriesgadas, debió preocuparse por algo más peligroso: una nave pirata. 

martes, 1 de enero de 2013

La Fragua de la caverna:enero

Feliz año a todos. Arranca 2013 con fuerzas renovadas en la caverna. Este mes incluirá las habituales entradas con las andanzas de Bindôlin y de Rick Rodgers. Así, podréis conocer qué les deparará a ambos el destino. Sigo trabajando en ambos casos en un material muy especial que espero tener listo a lo largo de los primeros meses de este recién empezado año

Como bien sabéis, Star Wars ocupa un lugar importante en esta casa. Si todo sale bien, llegará pronto a la caverna un material muy  de la nueva licencia del universo Disney. No se trata de material para Star Wars d6, avísados estáis, pero deseo que lo acojais con agrado. Tiempo al tiempo.